Muchos de nosotros crecimos
con la ilusión de ver llegar diciembre por una muy sencilla y particular razón,
porque ese era el mes de la navidad y con él llegaba un personaje muy especial
y el principal responsable de los esfuerzos que hacíamos - cuando lo recordábamos
– de portarnos bien.
Sería muy difícil encontrar un
niño al menos en este lado del mundo, que no haya escuchado hablar de Santa
Claus, Papá Noel o San Nicolás, pero ¿cuál es el origen de este interesante
personaje?
Alrededor del año 280 en la
actual Turquía, vivía una familia acaudalada que tuvo un hijo al que llamaron Nicolas. El padre de la criatura deseaba
que el chico se dedicase a los negocios mientras que la madre quería que fuese
sacerdote como su tío, pero finalmente fue el destino quien tomó la decisión
final, pues a raíz de la peste que azotó a los pobladores de la ciudad, Nicolas perdió a sus padres mientras
éstos trabajaban para ayudar a los enfermos. Esto conmovió mucho al chico que
decidió repartir sus bienes y se marchó a vivir con su tío (el obispo de Mira) ordenándose
sacerdote un poco más adelante y ocupando el puesto de su tío a la muerte de éste.
Su fama de repartidor de
obsequios se basa en una historia que cuenta que un hombre muy pobre estaba muy
preocupado debido a que no podría casar a sus tres hijas por la falta del
dinero necesario para cubrir la dote, de manera que Nicolas resolvió el asunto (teóricamente
en secreto) cuando llegado el momento de buscarles marido, colocaba una bolsa
de monedas en los calcetines de las niñas, que colgaban sobre la chimenea para
secarlos.
En los países de Europa este
personaje recibe el nombre de Papá Noel y su relación con los regalos navideños
data de las antiguas Saturnalias romanas
done al final de las mismas, los niños recibían obsequios de todos los mayores.
Alrededor del año 1624, este
personaje viaja al continente
americano de la mano de los inmigrantes holandeses donde fue transformado del Sinterklaas holandés al popular Santa
Claus que conocemos hoy en día.
La figura de este interesante
sujeto ha sufrido algunos cambios a través del tiempo por la influencia de
escritores y publicistas, transformaciones que van desde su lugar de residencia
hasta su vestimenta pasando por los populares renos que forman parte de su
medio de transportación. Sus principales artífices fueron los escritores
Washingthon Irving (1809) que fue quien lo transformó en Santa Claus; Clement
Clarke Moore (1823) quien popularizó los renos; el dibujante Thomas Nast (1863)
fue quien le dio la actual figura de gordo barbudo y bonachón. Y finalmente se
le atribuye a la empresa Coca-Cola el color rojo de su vestimenta y que le fue
adjudicada en su campaña publicitaria de 1931, pues anteriormente los colores
de Santa eran el blanco y el dorado o
el verde (más popular)
Como verán mis queridos
lectores todo en el universo evoluciona y nuestro querido personaje no podía
ser diferente. Sin embargo, independientemente de cual sea su preferido, espero
que hayan hecho suficientes méritos para recibir su visita.
By Ix